Me quedan por delante
diez días de vacaciones y sin nada que hacer. Bueno, solo tengo que hacer una
cosa. Me propuse cultivarme un poco y ver cine antiguo.
Empezamos por Cleopatra,
una de las películas más conocidas de la mujer de los ojos violetas, Liz
Taylor.
Después, seguimos con la
diva de las divas: Audrey Hapburn. Con tres de sus clásicos: My fair lady,
Charada y Roman Holiday.
Como seis películas ya es suficiente cine del
antiguo, decidí ver otras cuatro películas más actuales.
Instinto básico, con la
rubia más atrevida, la mujer por la que no pasa el tiempo: Sharon Stone y el siempre atractivo Michael Douglas.
La última producción de
Woody Allen, por la que ganó el Oscar a mejor guión adaptado: Midnight in
Paris.
Una comedia romántica:
Love Actually. Con un reparto de ensueño. Empezando por el chico más malo, y más
guapo, de la comedia romántica: Hugh Grant. Y acabando por la bellísima: Keira Knightley.
Pasando por: Liam Nelson, Colin Firth, Bill Nighy…
Y ya para acabar mi
Semana Santa, El discurso del rey. Basada en la historia del monarca Jorge VI,
interpretado por Colin Firth. Y la actriz inglesa Helena Bonham Carter como mi queridísima
Isabel, más conocida posteriormente como Queen Mother.
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